¿Qué es el FSC®?
El FSC es un sistema de certificación que permite que el consumidor final reconozca los productos fabricados con materias primas que vienen de bosques gestionados de forma correcta desde el punto de vista medioambiental, social y económico. Un bosque FSC es un bosque en el que la tala se controla y no perjudica la salud global del propio bosque.
FSC ha sido fundada por un grupo de asociaciones de protección del medio ambiente entre las que se encuentran Greenpeace, representaciones de los pueblos indígenas, organizaciones para la cooperación al desarrollo, productores forestales, trabajadores, industrias madereras, científicos y técnicos forestales para crear una alternativa a la destrucción de los bosques.
Por lo tanto, comprar a una empresa con certificado FSC significa comprar un producto de madera o derivado de la misma que no va a contribuir a la destrucción de los bosques. Eso no significa que un producto FSC sea más caro, simplemente que la compra premia a una empresa que utiliza para su negocio un producto de la naturaleza, que respeta y trata de proteger.
Un amplio número de bosques de todo el mundo tiene el certificado FSC: desde las plantaciones de pinos de Escandinavia, hasta los bosques de abetos y alerces de Italia, pasando por los bosques de encinas y hayas de los Países del Este, o las selvas tropicales de Brasil, Indonesia, México, etc.
En enero de 2015, la superficie forestal con certificado FSC se ampliaba en más de 184 millones de hectáreas en 81 países, mientras el número total de certificados COC ha subido a más de 28.680 unidades en 114 países.
En lo que se refiere a Italia, en febrero de 2015, la superficie forestal con certificado FSC se sitúa en un valor global de 51.099 ha. Las empresas con certificado FSC para la Cadena de Custodia (COC) en Italia son 1.896.
En el mercado se encuentran disponibles miles de líneas de productos con la marca FSC, entre los que hay muebles y decoración para interiores y para exteriores, utensilios de cocina, papel de cocina y para imprimir, pañuelos de papel, revestimientos y pavimentos, marcos y muchísimas más cosas, incluidos algunos productos forestales no leñosos (goma, nueces, etc.).